miércoles, 1 de mayo de 2013

SIN EMBARGO

Hoy por primera vez he puesto el culo en la bici desde el 24 de marzo.

El mes de abril ha sido un desastre. El mes de abril era el más importante, por el cambio horario había muchas horas de sol y coincidía con las semanas centrales del plan de entrenamiento, donde se trabaja el fondo físico de las 3 disciplinas... Pero por razones de trabajo que no viene a cuento explicar aquí llevo 4 semanas sin poder entrenar. Nada de nada. Y encima los fines de semana ha salido lloviendo.

No me quejo, me gusta mucho mi trabajo y ahora estoy en un proyecto nuevo que me tiene muy motivado, pero me está robando mucho tiempo y sin duda mi faceta deportiva se está resintiendo. He perdido toda la forma.


Faltan 32 días para Valencia LD y no estoy preparado. Ni remotamente. Hoy he hecho apenas 40km de bici y 9km corriendo y me ha costado mucho, lo he pasado mal. Lo mejor que podría hacer ahora mismo es renunciar a mi reto y ceder la inscripción a otra persona. Casi tengo que dar gracias de que el domingo pasado se suspendiera el Triatlón de Alicante.

Es triste pero es así.

SIN EMBARGO, los que me conocen saben que ahora sin dudas viene un "sin embargo".

Sin embargo, no lo voy a hacer. Sin embargo, ni el azar, ni la lluvia, ni la adversidad podrán detenerme porque hay algo que ellos no saben: estoy hecho de sueños.


Un día hace tiempo soñé que me hacía triatleta. Empece a nadar, me lancé al mar acongojado hasta las trancas, nadé en el agua salada y volví a tocar tierra. Completé mi primer Sprint. Soñé con las calles de Barcelona cortadas al tráfico para pasar con mi bici. Soñé con correr bajo el Arc de Triomf... y completé mi primer Olímpico. Soñé que en 2013 corría mi primer Media Distancia. Adopté mi sueño como un reto y le puse fecha. 2 de junio. Valencia.

Voy a hacerlo porque puedo vencer en las 3 batallas:
- En el curro, llevar mi proyecto hasta un punto en que esté controlado y no tenga que dedicarle 13 horas al día. Ya lo tengo casi.
- En mi entreno, volver a coger la forma poco a poco, sin locuras. Lo peor ahora sería una lesión.
- En la carrera, ser consciente de mis limitaciones y correr con cabeza. El objetivo es terminar.

Para conseguirlo cuento con mi equipo, quiero apoyarme en ellos para que me saquen a la carretera y me metan kilómetros hasta vomitar. Seguro que les encantará hacerme sufrir... y se lo agradezco. Gracias chicos.

Quedan 5 semanas. 32 días. Cabeza, trabajo, constancia... y la "plateada" será mía. Vamos.


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