INMERSIÓN TOTAL

Hace unas semanas un compañero del equipo me dio un consejo, y viniendo de quien venía -nuestro élite y ultrafondista Jesús Sanchez Bas- no podía dejar de escucharlo.

Coincidimos en la misma calle de la piscina. Yo intentaba completar mi distancia lo más rápido posible, pero él pasaba una y otra vez por mi lado, haciendo movimientos extraños y ejercicios de técnica. Me adelantaba en cada largo. Iba, literalmente, el doble de rápido que yo... y sin esforzarse. Digamos que yo era como un carguero, empujando el agua. Él era un velero, un surfista, cortándola, atravesándola.

No me dijo nada, "hola, que tal", "¿compartimos calle?", "¿ya te vas?"... lo normal. Fue porque yo le pregunté, que me dio su consejo: no tiene sentido hacer largos y más largos si no aprendes antes la forma de nadar suave, ligero, fácil. En la bici, corriendo, es difícil hacerlo mal, porque los pies están en su sitio, el culo en el sillín... siempre hay cosas que aprender, pero básicamente son deportes de potencia y resistencia. Nadando no. La natación es un deporte muy técnico. Tanto o más que el tenis o el golf. Cuando puedas nadar deslizándote por el agua, la velocidad y la resistencia vendrán por sí solos.

Para ilustrar la teoría, aparte de conseguir la ayuda de algún monitor de natación, me recomendó el libro INMERSIÓN TOTAL, un método revolucionario para nadar mejor, más rápido y fácilmente. Lo de "revolucionario" me sonó un poco a teletienda, pero decidí escuchar el consejo y darle una oportunidad.

Ya os iré hablando de este método. Para empezar os dejo este video de demostración de lo que en el libro se llama "nadar como los peces". Fijaos como el nadador se desliza por el agua sin salpicar, sin hacer ruído, casi sin esfuerzo ¡y va muy rápido!

Pocas brazadas, pocas patadas, ningún gesto innecesario y ni una caloría desperdiciada, sin embargo, avanza mucho con cada giro del cuerpo. Ésta es la natación de Inmersión Total. Ojalá algún día yo pueda nadar así.

Una última reflexión: la natacion en triatlón debe ser económica, eficaz; no nadamos para ganar. Nadamos para volver a tocar tierra y montarnos en una bici. El bacalao de verdad se corta en la carrera a pie, así que es vital aprender a nadar con la mayor eficacia y el mínimo desgaste.

"El que no nada no corre; el que no corre no gana".