jueves, 24 de octubre de 2013

NUNCA RETIRARSE. NUNCA CAMINAR. SIGUE.

Acabó la semana 10, de 14, de camino al Maratón Valencia 2013.
 
 
Lo importante de esta semana era el test del domingo, media maratón a tope, a poder ser sobre el mismo terreno que se correrá la Maratón. Por ello fuimos 9 valientes de TRIALCOY a correr la M.M. Valencia, una carrera llana y rápida con intención de darlo todo, buscar marca personal y "medir la temperatura" de nuestra preparación para la mítica distancia de los 42 kilómetros.
 
La teoría dice que, dándolo todo en esta carrera, con las cargas de trabajo y descanso que llevamos, puedes acabar bien la maratón añadiendo unos 25-30 segundos por kilómetro. La experiencia dice que si te sale mal puede ser un golpe durísimo contra la confianza, muy difícil de reparar.
 
Mi mejor marca en M.M. es de 1:31'25", a 4'20"/km, en febrero de 2013. Sé que ahora no estoy para eso ni mucho menos, así que salí con la idea de hacerla a 4'30", y a 4'30" me sale la M.M. en 1:35'. Esto significa que podría hacer la Maratón en 3:30' (a 5'/km). Es un buen objetivo. El objetivo original de 3:20' queda ya lejos; para eso tendría que haber trabajado mucho mejor, incluyendo gimnasio y apretando en las series, pero no pudo ser. Me conformo con bajar algo el 3:32' de hace 2 años, rondando el 3:30 en meta y disfrutando de cada kilómetro de principio a fin.
 
Llegó el día del test y la jornada fue perfecta con todo el equipo: viaje, bromas y comida post-carrera. Pero la carrera en sí fue mal. Salí entre la marabunta de 10.000 corredores intentando coger el ritmo. Al principio a 4'15", luego a 4'30", pero a partir del KM12 no me encontré bien, no podía mantener el ritmo y fui viendo que cada vez iba más lento. Iba a 4'45" y me costaba mantenerlo. No iba fresco, no encontraba la forma de ir más deprisa. No estaba mareado ni tenía ningún dolor en concreto, pero tenía la zancada lenta y no estaba bien. Marqué algún kilómetro a 5'00", con la sensación de estar dando el máximo... para nada. Todos los objetivos perdidos. La tentación de dejarlo todo y sentarte en el césped para ver pasar la carrera es enorme. Me acordé de Denia 2012, mi unica retirada. El sabor más amargo.
 
Fue uno de esos días que la situación te supera y no sabes muy bién qué está pasando, pero ya viví un abandono y no quiero volver a probar esa fruta podrida. Sabe dulce cuando paras, pero luego se repite como vinagre del malo durante horas, días y semanas.
 
Como soy así de cabezón, y la experiencia es un grado, me concentré en intentar encajar el golpe y que fuera lo menos lesivo posible. NUNCA retirarse. NUNCA caminar. Sigue. Un batacazo hoy sería un golpe de moral demasiado duro para la Maratón, y el objetivo final de todo esto es preparar la gran carrera. La Maratón es debilidad y confianza. La maratón es caer y levantarse. Hay que salir del hoyo y sacar lo máximo posible de estas situaciones. Eso es lo que nos queda, lo que recuerdas en el KM36: que un día estuviste mal y fuiste capaz de superarlo. Así se hace.
 
Mi cabeza volvió a la carrera en el KM15. Mis piernas nunca estuvieron ahí. Debí haber tomado un gel en el KM10 pero no lo hice, así que me lo tomé en ese momento. Me puse a buscar el ritmo y a trabajar. En el 16 me adelantó un chaval corriendo con chanclas (PLAS, PLAS, PLAS, PLAS...) No lo podía creer. Corregí mi postura, me puse a bracear y empecé a correr con toda mi alma, dándolo todo con el único objetivo de llegar lo antes posible... a un lamentable ritmo de 4'47"/km. Que se acabe esto ya. NUNCA retirarse. NUNCA caminar. Empezaron a caer los kilómetros, a 4'48". Da igual, uno menos. Vi que estaba por debajo de 1:40'. Último kilómetro, aprieta los dientes. Vi que estaba por debajo de 1:38. Si me hubiera dejado llevar por el desánimo habría acabado con mucho peor tiempo, y mucho más triste, pero no. Fuerza y honor. Good job.


 
La verdad es que llegué a la meta en el mejor momento, recuperado mentalmente y maquillando el resultado con un triste 1:37'37" que no esconde la verdad: desde el KM12 algo raro pasó, y no debería volver a pasar. Hay que buscar la causa y poner solución.
 
Hemos estado hablando de falta de series, un mal desayuno, no tomar el gel en el KM10, mucho estrés el día anterior (igual que en Denia). No hay excusas, todas estas variables forman parte del juego. De todas formas, lo que se extrae de aquí es que en el peor día, la peor carrera y peores sensaciones desde abril de 2012, he frenado el golpe en 1:37' (a 4'38"). Atacar la Maratón en 3:20' sería de locos, pero todavía puedo intentarlo alrededor de 3:30, incluso bajar mi 3:32' de 2011. Estamos ahí.
 
A mediodía no me dolía nada y la sensación era de no haber corrido, de no haber hecho nada en el día más importante. Es muy triste. Por la tarde salí a correr por Alcoy 10Km y todo bien, como si nada. El examen pasó y ni me enteré, mientras que mis compañeros vivieron la gran experiencia con buenísimas marcas, gran ambiente en Valencia y una carrera completísima. Qué lástima.
 
Todavía me quedan un par de tests antes de la Maratón: Volta a la Foia y M.M. Gandía. Voy a por todas. Lo más importante aquí será coger moral y sensaciones. La Maratón es 50% cabeza y 50% alimentación. La cabeza es confianza y la confianza se gana entrenando. El entrenamiento ya está llegando a su fin. Vamos a estar ahí y lo vamos a disfrutar. Vamos.
 
Como dice Paula Radcliffe, "la maratón es como la vida misma, hay sobresaltos y momentos duros: todo se trata de cómo los superas y los afrontas".
 

jueves, 17 de octubre de 2013

CORRERÁS SOBRE EL AGUA

Hoy es 17 de octubre. Resta un mes para el Maratón Divina Pastora Valencia. La llegada mágica nos espera.

 
Muchos recuerdos de la Maratón Valencia 2011: 3.32'. Reto conseguido. Deseando volver a sentir y vivir la experiencia, esta vez con las alas que te da ir con el equipo. Ya veréis qué grande es Valencia. Go TRIALCOY!
 
 
 
 



martes, 15 de octubre de 2013

LA MEJOR VERSIÓN

"Haz lo que puedas, con lo que tengas, donde te encuentres". Theodore Roosevelt.


No añores lo que no tienes. No lamentes lo que no tuviste. No pongas excusas. No llores lo que no eres o lo que nunca serás. No pienses en lo que pudo haber sido, lo que podrías haber hecho, lo que hubiera pasado si...

Antes pregúntate: ¿hago todo lo que puedo? ¿Aquí, ahora? ¿Estoy sacando el máximo provecho de todo lo que tengo y todo lo que soy? ¿Soy todo lo bueno que puedo ser?

De todas las realidades paralelas que pudieron haber sido, solo tenemos la que se materializó de verdad en esta precisa unidad de espacio/tiempo, aquí y ahora. Mira a tu alrededor. Agarra lo que tengas a mano. No importa cómo llegó hasta allí, o cómo llegaste tú. Date una vuelta, mira y piensa: ¿qué puedo hacer para ser la mejor versión de mí?

Hazlo. Ahora.

jueves, 10 de octubre de 2013

¡QUÉ!, SÓLO ESTOY TRATANDO DE CORRER

La pelea por un dorsal
 
A veces olvidamos en qué mundo vivimos y cómo estaba esto hace tan solo cuatro días. Me he quedado de piedra leyendo el siguiente artículo de Pikara Magazine. Parece mentira pero es así. A veces uno da gracias por haber nacido un poco más tarde. Y lo que nos queda por aprender.
 
 
Os recomiendo encarecidamente que lo leáis: "El Comité Olímpico prohibió hasta 1969 las pruebas femeninas que sobrepasaran los 200 metros: Una distancia mayor era no sólo un serio peligro para la salud de las mujeres sino también para su futura maternidad. Con semejantes esfuerzos, las mujeres envejecerían más rápido”. “Una actividad intensa significaba que se te podían poner las piernas grandes, crecer el bigote, el vello en el pecho y que tu útero se iba a caer.
 
Leer esto cuando cada día comparto entrenamientos, carreras, bromas y vivencias deportivas con mujeres que nos pintan la cara a la mitad de los hombres, ya sea nadando, corriendo o en bici, no puede menos que sorprenderme. El deporte de fondo tiene la gracia de que une a todos en el mismo espacio y tiempo. No se juega 1 contra 1, ni 11 contra 11. Todos caben, todos comparten el mismo asfalto y sacar el "ingrediente femenino" de esa receta significa perder una parte muy importante de la fórmula mágica. Y casi todo el sabor.
 
En las Olimpiadas de Amsterdam 1928, la presencia femenina era mínima, así que deportistas de todas las modalidades no reconocidas se inscribieron en la carrera de 800m lisos. Muchas, sin experiencia en esta distancia, llegaron exhaustas a meta, lo cual reforzó las tesis machistas. El COI prohibió las carreras largas. Durante décadas, ninguna mujer pudo inscribirse en ninguna prueba de más de 200m.

Sin embargo, como es lógico, lo intentaron.
 
La griega Stamis Rovithi fue la primera mujer en correr un maratón de manera extraoficial. Fue en las Olimpiadas de Atenas de 1896. Tras denegársele la inscripción al maratón masculino, Rovithi decidió hacer el recorrido por su cuenta a través de un trazado paralelo que quedaba fuera del marcado oficial.
 
Pasaron muchos años, muchos intentos fallidos, hasta que en el Maratón de Boston, 1966, Roberta (Bobbi) Gibb, de 23 años, recibió una carta del director de la carrera en la que se rechazaba su participación oficial. Bobbi se vistió con ropa de su hermano: bermudas y sudadera con capucha azul que ocultaba el top negro que usaba para correr. Se escondió entre los arbustos y, tras el pistoletazo de salida, esperó a que hubieran algunos corredores en la pista y saltó a la carrera.
 
Los participantes se percataron de que había una mujer corriendo con ellos y la animaron hasta tal punto que Gibb decidió quitarse la sudadera. El público también la apoyó y logró la atención de la prensa. Gibb acabó su recorrido en 3 horas, 21 minutos y 40 segundos, por delante de los dos tercios de corredores que quedaban en pista. Los medios recogieron la noticia en primera plana y el apoyo oficial para que las mujeres pudieran correr maratones parecía inminente.
 
Bobbi Gibb, tras finalizar el Maratón de Bostón 1966.
 
Sin embargo, al año siguiente la participación femenina seguía estando prohibida y Gibb volvió a correr sin dorsal. Otra mujer, Kathrine Switzer, 20 años, sí lo consiguió: utilizó sus iniciales (K. V. Switzer) en la inscripción y se incorporó a la carrera, camuflada con ropa ancha, con un número de dorsal que quedará para la historia: el 261. La corredora hubiera podido “pasar desapercibida”, pero uno de los comisarios de la carrera la descubrió y se abalanzó sobre ella agarrando su dorsal para arrancárselo y gritando “¡Lárgate de mi carrera y dame esos números!”.
 
“Recuerdo que cuando llevábamos menos de cinco kilómetros recorridos, un responsable de la organización se bajó del camión de la prensa, que estaba justo delante de mí, con la intención de sacarme del maratón. Me sentí muy asustada en ese instante y lo primero que se me pasó por la mente fue alejarme lo antes posible de él. Los corredores que estaban junto a mí empezaron a gritar que me dejara en paz. Entonces, mi novio, que era un exjugador de fútbol americano, le hizo un placaje con el cuerpo y lo sacó del recorrido […]. No permití que el miedo me detuviera. Quería demostrar que merecía estar allí y que las mujeres podíamos correr, al igual que los hombres, largas distancias”.
 

La foto del comisario intentando arrancar el dorsal dio la vuelta al mundo. Tras el incidente, los periodistas se pusieron muy furiosos. Le gritaban: “¿Qué estas tratando de probar? ¿Eres una sufragista? ¿Estás en una cruzada?”. Ella pensaba: “¡Qué! Sólo estoy tratando de correr”. Switzer acabó la prueba en un tiempo de 4 horas y 20 minutos.
 
5 años después (1972), el Maratón de Boston se abrió a la participación oficial femenina. Switzer luchó y consiguió que el maratón femenino fuera prueba olímpica en Los Ángeles '84. A Gibb le dieron su medalla como primera clasificada en Boston en 1996, 30 años después. Hoy todavía en algunos países hombres y mujeres tienen que correr por separado, "sin mezclarse".
 
El atletismo popular te quita todos los prejuicios, se ven cosas increíbles. El deporte me ha enseñado que en el asfalto no hay hombres ni mujeres, no hay colores, razas ni edades. Sólo hay personas tratando de superarse, realizarse o alcanzar un objetivo personal. Todos deberían tener derecho a esto. Todos tendrían que poder compartir su locura con otros igual de locos. Si luego "les sale vello" en el pecho o "se les cae el útero" por el camino es su problema, aunque algunos se sigan empeñando en decirnos qué hacer con nuestra vida.

lunes, 7 de octubre de 2013

SEMANA 8

Buen trabajo el fin de semana, entre la carrera del sábado y la tirada larga del domingo.
 
Sábado Volta a Peu a Agullent, 9ª carrera del Circuit y penúltima que correré este año, ya se acaba. 8Km con cuestas, como siempre, que empecé y acabé bien aunque pinché un poco por la mitad de la carrera. Un último kilómetro de locos, dándolo todo y al final 36', a 4'34"/km. Creo que salían algo más de 8km pero da igual.
 

 
El domingo tirada larga con los compañeros, hicimos la "auténtica" (según el Presi) Volta al Món, saliendo desde el polideportivo hacia Alcoy, subiendo el Salt hasta Montesol, y luego por la Safranera hasta la Carrasca y bajando la carretera de la Font Roja hasta el polideportivo otra vez. Contando el tramo hasta la fuente de Montesol y el rato que invertimos en beber y tomar el gel, salieron un total de 25km en 2h15'. Lo mejor, aparte del trabajo de piernas y fondo, el buen rollo del grupo y la conversación durante 2 horas largas.
 

 
Estreno de las nuevas Mizuno Wave Fortis, regalo de cumple (¡gracias Ana!). Son las 5ª Mizuno que estreno en 7 años corriendo media y larga distancia. Se adaptan a mi pie como un calcetín y jamás me han provocado ningún problema. A partir de ahora las Asics las reservaré para montaña y para ir al gimnasio. El asfalto quiere Mizuno :)
 

 

martes, 1 de octubre de 2013

SEMANA 7 - RECUPERACIÓN

Acaba septiembre y empieza el otoño. En mi casa eso significa dos cosas: (1) todavía es de noche cuando entro a trabajar y (2) celebro cumpleaños.
 
Pasó la semana 7 y ya estamos a mitad del camino hacia la Maratón. Ésta ha sido una semana de descarga y recuperación que ha coincidido con celebraciones, cenas, regalos: el lunes estaba hecho polvo y ya hice bastante con ponerme los pantalones por la mañana. El martes fue mi cumpleaños y me lo tomé de medio-fiesta, saliendo a trotar un ratito en plan "voy a sudar un poco para poder ducharme". El miércoles era el cumple de mi hermana y de mi suegro. El jueves toda la tarde preparando la asamblea de TRIALCOY. Llevar la bici a arreglar. El viernes al cine con Laia. El sábado carrera, asamblea y cena con el equipo. El domingo todo el día en Valencia viendo delfines y tiburones en el Oceanogràfic. En fin, una semana de poco entreno y mucha actividad.
 
El sábado estuvimos en el Gran Fons Monica Pont d'Albaida, 8ª carrera del Circuit Vall d'Albaida con 10.900m por Albaida, Benissoda y la sierra que hay detrás. Muchas cuestas, bajadas rápidas. Estuvieron como siempre Rafa y Jordi, grandes compañeros dentro y fuera del asfalto, y las mismas caras conocidas de todas las carreras. Este humilde Circuit es como una gran familia donde todos nos conocemos y nunca te falta una sonrisa. Respecto a la carrera, se me da fatal bajar, pero estoy subiendo bien y lo estaba dando todo. Fui todo el rato con Marcos Francés, del Club de Atletismo Alcoy: lo dejaba atrás en las subidas, me cazaba en las bajadas y nos íbamos animando mutuamente. En los últimos 500m quiso tirar de mí pero no pude. Me faltó ese puntito al final. Se me fue 100m delante porque podía más que yo.
 
Al final buen resultado, 49' (a 4'30"). Pienso que hace 6 semanas no podía casi caminar. He ido progresando con cuidado, tanto las piernas como la cabeza, y ahora ya estoy subiendo fuerte y sintiéndome seguro, mucho más equilibrado en cuerpo y alma, relajado y enfocado, haciendo kilómetros y corriendo a ritmos de media maratón.
 
Ahora empieza de verdad el rock'n'roll. Ahora el plan de entrenamiento se pone fuerte con rampas, series y ritmos serios. En octubre test de Media Maratón, también en Valencia, luego la Volta a la Foia... Quedan 7 semanas. 49 días. Todo un mundo de experiencias y sensaciones para terminar corriendo sobre el agua.
 
5 oct: Volta a Peu a Agullent (8km)
13 oct: Volta pel Benicadell
19 oct: Volta a Peu Bocairent (que no iré...)
20 oct: MEDIA MARATÓN VALENCIA (a tope, test para la Maratón)
27 oct: Volta a la Foia Castalla-Ibi-Onil (27km)
17 nov: MARATÓN VALENCIA